La Orca , es un mamífero marino del orden de los Cetáceos, el de mayor tamaño de la familia de los delfínes oceánicos, conocida como Delphinidae. Se encuentra en los océanos de todo el mundo, desde las frías regiones árticas a los cálidos mares tropicales, correspondiendo al segundo mamífero con la mayor distribución en la tierra (después del hombre). Es un animal sumamente versátil, siendo un depredador que se alimenta de peces, tortugas, aves, focas, tiburones e incluso de otros cetáceos.
Especies
Además de la Orcinus orca, existen otras dos especies de delfínidos
que reciben el nombre de orca. Una de ellas es Pseudorca crassidens, que
se conoce con los nombres de orca negra, falsa orca y orca bastarda.
Con una longitud de entre 4,3 y 6 m y un peso que raramente alcanza las 2
toneladas, tiene la aleta dorsal falciforme y las pectorales curvadas
hacia atrás. Vive en las agua tropicales y cálidas de todos los mares
del mundo, a cierta distancia de la costa, y no está en peligro de
extinción. Su alimento fundamental son los calamares y los peces grandes
que atrapa hasta en el fondo marino. Es gregaria y forma grupos de
varias decenas de individuos.
La otra especie es Feresa attenuata, conocida como “orca pigmea”. Como
su nombre indica, es mucho menor que las otras orcas, pues el macho no
llega a los 3 m (y la hembra a los 2,5 m) y apenas rebasa los 200 kg.
Vive en todas las aguas tropicales y subtropicales de todo el mundo y
tampoco se encuentra amenazada. Se alimenta de pequeños peces y
calamares y su biología es poco conocida.
Hábitat
La orca ocupa prácticamente cualquier ambiente marino, sin sumergirse
a gran profundidad. Es una de las especies con mayor capacidad de
colonización, adaptándose a las condiciones de cada ecosistema, tanto
oceánico como litoral, incluyendo las aguas someras y las de la banquisa
ártica y antártica. Existen dos tipos de ocupación del espacio: la
residente y la migradora. Las manadas del primer tipo suelen ser más
litorales y ocupan áreas limitadas, más o menos predecible,
alimentándose básicamente de peces. Quizá la más conocida sea la de la
Columbia Británica, en el sudoeste de Canadá.
Las poblaciones migradoras son más oceánicas y no tienen límites
definidos en su dispersión, dependiendo su establecimiento de la
disponibilidad de presa. Suelen capturar mamíferos y es sabido que
pueden recorrer 550 km en diez días. En muchos grupos estos movimientos
se circunscriben a rutas estacionales, pero también existen grupos
“errantes” que se mueven al azar en busca de alimento o eventualmente
siguiendo migraciones de animales presa si se topa con ellos.
Alimentación
Carnívoro estricto, la orca es un depredador oportunista capaz de
atacar cualquier animal marino, incluyendo las gigantescas ballenas y
los tiburones más agresivos, sin descartar el tiburón blanco. Se han
descrito ataques de este temible escualo a una cría de orca, acudiendo
enseguida en su ayuda la madre y demás integrantes del grupo, que
pusieron en fuga al intruso o incluso lo mataron. No obstante, lo normal
es que la orca se alimente de calamares, pingüinos y otras aves
marinas, multitud de peces, incluso rayas y tiburones, así como algunos
de pequeño tamaño. Entre los más habituales figuran bacalaos, eperlanos,
atunes…
Además, las orcas conocen los sitios y las épocas donde se
concentran ciertas especies de peces. Por ejemplo, cuando llega la hora
de la reproducción de los salmones, éstos se concentran a miles en la
desembocadura del río que se disponen a remontar, y allí están las orcas
esperándolos. Un caso conocido es el del estrecho de Johnstone, al
norte de Vancouver, al que acuden dieciséis grupos de orcas. Los
cardúmenes de salmones en formación producen un reflejo característico
en el sonar, por lo que a las orcas no les resulta muy difícil
localizarlos. Cuando se acercan para perseguirlos uno a uno suelen
“desconectar” el sonar y utilizar la vista, más inmediata y precisa a
corta distancia.
La orca es uno de los pocos cetáceos que se alimenta de mamíferos
marinos: morsas, focas, leones marinos y demás pinnípedos, e incluso de
otros cetáceos, como delfines y ballenas. Para cazar a estas últimas,
incluidas las que ostentan el récord absoluto de tamaño -la ballena
azul-, las orcas se organizan del siguiente modo: mientras unas atacan y
golpean a la ballena con sus aletas para inmovilizarla, otras le
muerden los labios para obligarlas a abrir la boca y arrancarle la
lengua, lo que significará el fin del animal. No obstante, el gigante no
es aprovechado por completo ni mucho menos, ya que enseguida se
hundirá.
En todo caso, la dieta de las orcas varía mucho según la región,
la manda considerada y la época del año. Cuando tienen hambre pueden
nutrirse de presas tan insólitas como estrellas de mar, tortugas
marinas… y en algún caso se ha comprobado el ataque a ejemplares de su
propia especie. Por todo ello, no es exagerado decir que la orca es el
superdepredador de todos los ecosistemas marinos que ocupa.
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